Unboxing: Kit de Lenguaje Inclusivo

Lenguaje Inclusivo

Hoy empieza una nueva sección del blog: los «unboxing». Como primer producto traigo algo novedoso llamado Kit de Lenguaje Inclusivo. Es algo nuevo que no todo el mundo comprende, así que intentaré explicar de qué se trata. 

El Kit de Lenguaje Inclusivo es un producto novedoso creado con la idea de dar más visibilidad a las mujeres en el uso del español, tanto en el día a día, como en contextos oficiales y laborales. Este Kit forma parte de la gama Desobediencia Lingüística, donde podemos encontrar otros productos como la Universal K, El Borrador 2 en 1 de Tildes y Haches y el Cambiador de Bes y Uves (total, suenan igual). Veamos qué se esconde detrás de esta idea que tan bien suena a priori.

El packaging del Kit de Lenguaje Inclusivo deja que desear en algunas ocasiones. Puede presentarse en forma de feminista cabreada o cabreado o en un tuit fuera de lugar. También se presenta en metidas de pata como el famoso miembros y miembras.

Matriotismo

Matrocinio

Una vez retirado el envoltorio encontramos un set de mecanismos lingüísticos pensados para contrarrestar la omnipresencia del género masculino. El primero de ellos, y el más conocido, es la repetición, duplicación o inclusión de ambos géneros. Todos lo hemos visto en funcionamiento en los alumnos y alumnas y en los miembros y miembras. Hay que tener en cuenta que este mecanismo solamente funciona con usuarios humanos, ya que nadie dice Los gatos y las gatas son carnívoros y carnívoras. El Kit de Lenguaje Inclusivo también trae una silla para que puedas esperar sentado a que termine la frase Los profesores y profesoras encargados y encargadas de investigar el caso castigaron a todos los alumnos implicados y a todas las alumnas implicadas en el robo.

Todas y todas

Para los que no se sienten cómodos con la interfaz de la repetición, existe el modo Nombre Colectivo Neutro. En este modo podemos encontrar las variantes como alumnado o profesorado, pero debemos andar con ojo, ya que si no configuramos correctamente este interfaz o nos despistamos, podemos llegar a soltar en público cosas como el representado para referirnos a los representantes.

Representado

Para los más innovadores, el Kit de Lenguaje Inclusivo trae la función Impronunciables, dentro de la cual podemos elegir entre una variedad de símbolos que, al no formar parte de la lengua ni del alfabeto, no sabemos cómo pronunciar. Pero cumplen con su función de evitar a toda costa la -o que suena a masculino. Los Impronunciables pueden usarse por separado o en conjunto como en Querid@s amigxs, estáis invitad*s a mi fiesta de cumpleaños.

Amig@s

Diputadarrobas

Ahora en serio…

Dejando las bromas a un lado, es evidente que es necesario dar visibilidad a las mujeres y a todo lo que pueden aportar a la sociedad, pero mi opinión personal es que este ficticio Kit de Lenguaje Inclusivo no es ni de cerca lo mejor que podemos hacer para luchar contra las ideas preconcebidas del machismo.

Lo que yo creo que debemos hacer es eliminar la necesidad de poner etiquetas. Y más profundamente todavía, eliminar las etiquetas que usamos y que sólo nos perjudican como sociedad. Decimos que en español el género masculino se marca con una -o y el femenino con una -a, pero decimos la mano y el futbolista, por poner solo un ejemplo. El género gramatical del español es arbitrario. Por eso, siempre que hablo de este asunto recuerdo a un amigo inglés que cuando aprendía español decía la mapa y no comprendía la diferencia entre el cura y la cura.

A dónde quiero ir a parar es que cuando dejemos de separarnos a nosotros mismos, cuando dejemos de diferenciarnos los unos de los otros con etiquetas, es cuando realmente comprenderemos que ya somos iguales. Entonces las etiquetas hombre, mujer, masculino, homosexual o lesbiana serán cosa del pasado. Por decirlo de alguna forma, podemos empezar a considerarnos como los ángeles: ellos no tienen sexo ni género, ¿para qué los quieren teniendo alas?

Algunos pueden objetar que el heteropatriarcado ha ignorado a las mujeres, en el mejor de los casos, y tienen razón. Por eso afirman que el cambio de paradigma debe reflejarse en la gramática de la lengua. Pero yo creo que son los propios hablantes los que deben dejar de lado esas etiquetas obsoletas. Simplemente, dejar de hacerles caso. De la misma forma que en inglés lawyer representa a todas las personas que ejercen el derecho, en español juez también. Y en cuanto a las parejas -o/-a, como abogado y abogada, deberíamos ser capaces de llamarlos a todos abogados, que es la forma que más naturalmente suena, y dejarnos de pataletas por nimiedades que no llevan a nada útil.

A mí me gusta pensar en el heteropatriarcado como en un muro. Es un obstáculo para muchas personas y cuando nos enfrentamos a él parece imposible saltarlo o salvarlo de cualquier manera. Sin embargo, si nos alejamos un poco hacia atrás, podemos ver que el muro está en un campo abierto. Podemos lanzar piedras contra el muro, pintar grafitis, intentar construir escaleras o morir dándole cabezazos, pero el más subversivo de todos los actos es simple y llanamente rodear el muro. Pasar de él. Demostrarle que no tiene poder sobre nosotros. El muro pierde toda su razón de ser si simplemente le damos la vuelta y disfrutamos de las vistas.

2 comentarios en “Unboxing: Kit de Lenguaje Inclusivo

  1. «A donde quiero ir a parar es que cuando dejemos de separarnos a nosotros mismos, cuando dejemos de diferenciarnos los unos de los otros, es cuando realmente comprenderemos que somos iguales.» Ya sé que no se me oye, pero estoy aplaudiendo.

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  2. Ya, pero si a cualquier persona le dices dibuja al hombre medieval, dibujará a un hombre y no a una mujer, la mujer queda relegada, oculta, sin valor aparente y eso no debería ser así, por lo tanto algo habría que hacer.

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